¿Dónde comenzó?

¿Sabías que durante miles de años los hombres eran los únicos maestros y practicantes de Yoga?

Si observamos las grandes escuelas tradicionales de India y sus lideres, los rishis, swamis y gurús han sido siempre hombres. Las imágenes de yoguis y todo aquello que nos conecta con la gran sabiduría y práctica de Yoga están relacionados con lo masculino.

Lo cierto es que el protagonismo de las mujeres en toda la tradición antigua del Yoga es casi inexistente, fueron los hombres los responsables de introducir y fundar las primeras escuelas de Yoga en occidente.

A día de hoy la comunidad del Yoga se compone sobre todo de mujeres (70%) y un (30%) de hombres.

El prejuicio del yoga para los hombres es menos recurrente

Algunos de los prejuicios que los hombres suelen tener respecto a la práctica son la falta de flexibilidad y coordinación, el desconocimiento de lo que es esta disciplina e incluso el miedo al ridículo.

Desde mi experiencia como profesora de Yoga creo que esta disciplina no conoce de género, el Yoga te pone en contacto con lo que eres; si eres un hombre tu Yoga será masculino, y emplearas los recursos que tú tengas. El Yoga puede ser tan masculino como lo sea quien lo practique.